Igual miento si digo,
que no conozco aquel lugar,
donde el viento sopla fuerte
y nada se tambalea.
Igual digo la verdad
y menciono esos graznidos
que no dejan de sonar.
Siempre vienen y,
más perdidos que convencidos,
siempre se van.
Igual ni miento, ni digo la verdad,
y logro comprender,
este grito del silencio ,
que persuade a mis palabras
para llevarlas consigo.
Igual da igual
y estas letras,
mientras se van enlazando,
son mentira y son verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario