martes, 27 de enero de 2009



Courbet



El origen del mundo no se da importancia a sí mismo. Vive, palpita, brilla en su oscuridad. Sonríe ante la embestida de la duda. Condesciende a la glosa. No necesita.



6 comentarios:

Marisa Peña dijo...

"El origen del mundo no se da importancia a sí mismo"...Una frase de cabecera, amigo Sergio.Excelente. Un abrazo

s dijo...

Muchas gracias, Marisa. Me alegra de que te haya gustado.

Abrazos.

Anónimo dijo...

Hermosa prosa.
Un beso Sergio. Ines

s dijo...

Gracias, Inés, me alegra que te guste. Besos.

Olga Bernad dijo...

La naturalidad de lo importante.
(Era difícil de comentar, con esa señora y su importancia mirándonos directamente:-)
Un saludo, Sergio.
Genial.

s dijo...

La verdad es que sigo sin estar seguro de esta pequeña prosa. Desde luego mucho mejor el cuadro, que a mi particularmente me encanta, e incluso me vuelve loco (risas). Gracias siempre por tus visitas, Olga. Me alegra de que te haya gustado.

Abrazos.